Hasta no hace mucho los clientes de comunicación tipo Messenger eran un tema de discusión entre los ejecutivos de las empresas, las pláticas sobre bloquearlo para impedir su uso duraban más tiempo que lo que los usuarios tardaban en encontraban la forma de sortear los bloqueos y continuar usándolo, de esta forma ha terminado por ser aceptado y en algunos casos, sino es que en la gran mayoría, le han dado un uso enfocado al negocio.

Al no tener una estrategia definida los usuarios de estos medios le dan el mismo enfoque personal con que usan sus cuentas propias, dejando al sentido común ser su única guía al momento de postear algún comentario.
Claro que existe la opción de las redes sociales privadas donde se deja de lado la funcionalidad principal que es la masificación, el beneficio se puede palpar en términos de colaboración y conocimiento colectivo.
Lo que hoy día requieren las empresas para capitalizar el uso de las redes sociales es el binomio profesional y social trabajando a la perfección, pero pocas empresas, por no decir casi ninguna, han encontrado la forma de hacerlo.

Recordemos que los expertos han calculado el valor de Facebook en unos $100 mil millones de dólares, nada mal para una empresa con unos 10 años en el mercado, mejor aun cuando el dueño no rebasa los 30 años de edad, esto hace que los argumentos más usados por los empresarios mexicanos; el ejemplo más común es cuando argumentan que "así lo he hecho los últimos 25 años", pierda sustento y nos ponga a pensar cual es la mejor forma adoptar nuevas formas de hacer negocios.